“A fuego lento”: una película divertida, delicada y profundamente conmovedora sobre la vejez

Crítica dramática de Sarah Friedland, protagonizada por Kathleen Chalfant y Katelyn Nacon (Estados Unidos, 1 hora y 30 minutos). En cines el 14 de agosto. ★★★★☆
Por Xavier Leherpeur
Kathleen Chalfant en "A fuego lento", de Sarah Friedland. DISTRIBUCIÓN ARIZONA
Para ir más allá
A feu doux: se refiere a la cocción lenta, sin prisas, optimizando sabores y aromas. Convertido en el título de esta conmovedora película sobre el envejecimiento, la pérdida de rumbo y el comienzo de un nuevo capítulo (el último) en una residencia de ancianos, esta fórmula culinaria evoca a la perfección el talento de la directora que, en su ópera prima, se toma el tiempo y se casa con el de su heroína para narrar la intimidad de una anciana, a veces perdida, a quien su hijo decide internar en un instituto. Esta ficción en un entorno médico, nunca clínica gracias a la delicadeza y precisión de la escritura y la puesta en escena, cristaliza las emociones y deja traslucir un humor deliberadamente asertivo. Esta soledad es sublimada por la inmensa Kathleen Chalfant, quien, al igual que su personaje, se niega a ser abrumada, prefiriendo florecer en el sol y la travesura. Magnífica.
Le Nouvel Observateur